Dotada de una deslumbrante sonrisa y una belleza a flor de piel, Silvina Scheffler se prendió a una jugosa charla en la que hizo un recorrido por su participación en el juego más importante de la TV.
Pocos minutos antes de su ingreso al programa y recién salida de los camarines, la esbelta entrerriana hizo un balance equilibrado de su paso por el reality.
Se atrevió a conversar de todos los temas y dejó en claro por sobre todas las cosas su calma ante la repentina popularidad y el acceso al complicado mundo mediático.
A priori, apenas se conoce su personalidad sensible y un poco retraída es difícil comprender su decisión de participar del juego, y ella así lo explicó: "Tenía una cuenta pendiente. A mi me gusta la carrera de modelo, hacer fotos, desfiles y también algo de conducción. Gran Hermano me dio la oportunidad de darme a conocer. Mi meta está cumplida, la gente ya me conoce. Consiga o no un lugar dentro de los medios, ya estoy feliz".
La chica tiene claras las posibles causas de su eliminación del juego.
"Creo que la gente no me llegó a conocer. Por ahí con el resto se identificaba más por alguna historia en particular pero por una decisión personal decidì no hablar de ciertos temas. Aunque sabía que me jugaba en contra, no me pongo mal por eso" señaló al respecto.
Más adelante ahondó sobre el tema: "Me relacioné más con las personas con las que tenía más cosas en común como Vanina, Marianela o Juan. Con los demás tenía muchas diferencias, lo que generó una relación mínima, casi nula, y que hizo que me hizo imposible integrarme plenamente al resto de los chicos".
También se refirió a sus momentos malos adentro de la casa, que le hicieron desear su pronta eliminación. "Hubo semanas en las que no la pasé bien. Me sentí juzgada y realmente no sé si iba a poder aguantar mucho más. Yo no lo viví como un juego. Está bien jugar pero también hay que respetar al otro y hay cosas mínimas que hay que tener en cuenta", añadió.
Sin embargo Silvina prefiere rescatar ciertos aspectos positivos de esta experiencia que le permitieron abrir una luz sobre temas que tenía pendientes en su vida.
"Personalmente me voy muy satisfecha. Me ayudó mucho estar adentro de la casa para pensar y reflexionar sobre mi vida, el trabajo y el estudio. Y creo que ya estaba preparada para salir, era el momento justo", explicó.
Sobre los rumores acerca de su relación con la prostitución y otros temas mediáticos que se dijeron sobre su persona, también dejó su postura: "Al salir me enteré que se dijeron cosas muy feas. No hay motivo para hablar sin fundamentos. No había nada oculto ni raro en mi vida, sólo que a la casa quería entrar yo sola y no mi familia. Tampoco quise hablar sobre mis ex novios. Dejé en claro que vivía en un pueblo chico donde cada detalle que pudiera dar iba a ser referencia a personas que ahora tienen su vida y su pareja y no venía al caso".
Al comentar acerca de Pablo su mirada se hizo más vivaz, sin embargo la chica le pone paños fríos a esa historia: "A él lo quiero mucho, lo extrañé. Pero no estoy esperando a que salga para después ponernos de novios. Fue una relación dificil de explicar, desde el primer día algo nos unió pero realmente no sé bien qué fue. Todo esto es muy raro adentro de la casa y afuera se verá".
A simple vista se la notó muy cómoda frente a las cámaras y confesó que su sueño es ingresar de lleno al mundo de los medios pero desde otro lugar al que todavía no definió. Sin embargo prefiere mantener la cautela sobre su futuro.
"Cuando ingresé en la casa era uno de mis sueños estar en los medios, pero todavía es muy temprano para pensar si se puede dar o no. Estoy tranquila y disfrutando solamente del día a día", acotó.